Aire comprimido en industria
Instalación de compresor variable y reparación de fugas en una red de aire comprimido industrial
Planteamiento
Industria del sector del embalaje con un importante consumo de aire comprimido: en torno a 300.000 kWh/año, cerca del 15% del consumo eléctrico total. Debido a los desiguales ritmos de trabajo en los diferentes turnos, disponen de 3 compresores fijos de distintas potencias: 35 kW, 55 kW y 75 kW. Un operario se encarga de arrancar el compresor necesario en cada turno, en función de la demanda prevista de aire comprimido.
En muchas ocasiones se trabaja con un compresor más potente de lo necesario. Adicionalmente, en cada turno de trabajo la demanda de aire comprimido es discontínua, dependiendo del tipo de cartón y embalajes que se fabriquen. El resultado final es que durante largos periodos se encuentra trabajando en descarga un compresor de más potencia de la necesaria.
Soluciones implantadas
Se instala un compresor de caudal variable de 75 kW, que permite conseguir los siguientes resultados:
Adicionalmente se lleva a cabo una inspección de fugas de aire comprimido empleado pistolas de ultrasonidos. Se corrigen todas las detectadas reduciendo el porcentaje de fugas desde el 15% inicial hasta el 6,8%.
Resultados
La instalación del compresor variable genera unos ahorros energéticos de más del 33%, aproximadamente 110.000 kWh/año. Con la reparación de fugas en la red se logran ahorros adicionales de 18.000 kWh/año.
La inversión realizada es de 38.500 €, consiguiendo ahorros superiores a 13.000 €/año.
Con esta medida, se evita la emisión de 34,6 tCO2/año